Ese de la foto soy yo, era un día del mes de mayo del año 1983. Con mi cara inocente y cerca de los 7 años, con esa camisa de pico que se llevaba en aquella época, mis gafas de pasta y mis orejas grandes. En aquella época era más tirando a flacucho, despistado y normalmente mirando a las musarañas. Como todo buen niño le gustaba imitar lo que hacía su hermano mayor, todo lo que él hacía lo quería hacer yo también. Algunas veces lo conseguía porque mi madre se ablandaba y otras no.
Esto de aquí es una típica cámara de los 80, una de esas mini cámaras que solían tener una gran mayoría de familias, de fácil uso y que se podían meter en el bolso más pequeño de la historia. En si era tan sencillo como coger un lado con una mano, coger el otro lado con la otra mano, abrir el visor tirando con fuerza las manos hacía fuera, mirar por la mirilla y darle al botón rojo para disparar.
Esta foto de aquí es el resultado de varias cosas, la primera de juntar a Andrés y una cámara Agfamatic, me salí con la mía y me dejaron hacer una foto, la segunda le di un matiz moderno con esa raya en medio y ese movimiento difuso de la imagen y tercero y último me dejé el ojo en la cámara. Si amigos, tenía la lente abierta y estaba preparado para darle al botón rojo, pero no fue exactamente así...
Le di al botón rojo mientras cerraba la lente con tan mala suerte que me enganchó el parpado con el cierre...
Cosas de niños, por cierto, en la imagen el hermano al que siempre quería imitar y la madre que me dejó hacer la foto...
Insensatos!!!!.
Saludos.
1 comentario:
Lo cierto es que a mi mis padres nunca me dejaron coger una cámara de fotos (bastante torpe era ya como para dejarme algo de valor).
También he de reconocer, que soy bastante más joven y los 83' quedan muy atrás en mi vida (como una década exacta)
Un saludo ;)
P.D: La foto tiene su encanto.
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